El Global Risks Report de 2022 advirtió sobre la posibilidad de una recuperación económica divergente tras la pandemia de COVID-19, lo que podría profundizar divisiones en un momento en que la colaboración era crucial para abordar desafíos globales inminentes. Sin embargo, pocos podrían haber anticipado la inestabilidad que se avecinaba, impulsada esta vez por un nuevo conflicto en Europa.

Las consecuencias de la pandemia, tanto en términos de salud como económicos, se han convertido rápidamente en una serie de crisis interconectadas. Las emisiones de carbono han aumentado a medida que la economía global se reactivaba, situándose como uno de los principales riesgos socioambientales. La guerra en Ucrania ha utilizado alimentos y energía como armas, elevando la inflación a niveles no vistos en décadas y desencadenando una crisis de costo de vida a nivel global. Estos factores combinados han acelerado la conciencia sobre los riesgos socioambientales a los que las empresas se enfrentan.

De hecho, en el Global Risks Report 2023, se identifican los principales riesgos para las empresas, y muchos de ellos tienen un marcado componente socioambiental. Entre los riesgos más destacados se encuentran la pérdida de biodiversidad, el cambio climático, la seguridad alimentaria y el suministro de energía. Estos riesgos son un recordatorio claro de que las empresas deben prestar atención a su huella ambiental y considerar cómo abordar estas cuestiones de manera efectiva.

La 18ª edición del Global Risks Report toma en cuenta este contexto de tensiones geopolíticas latentes y la convergencia de riesgos socioeconómicos. Identifica los riesgos percibidos más graves para las economías y sociedades en los próximos dos años. El enfoque colectivo del mundo se centra en la «supervivencia» de las crisis actuales: el costo de vida, la polarización social y política, el suministro de alimentos y energía, el crecimiento débil y la confrontación geopolítica, entre otros.

Sin embargo, la atención y los recursos necesarios se están desviando de los riesgos emergentes o que se están acelerando rápidamente, como los relacionados con los ecosistemas naturales, la salud humana, la seguridad, los derechos digitales y la estabilidad económica, que podrían convertirse en crisis y catástrofes en la próxima década. Una era de bajo crecimiento, baja inversión y baja cooperación socava aún más la resiliencia y la capacidad para gestionar futuros shocks.

Este informe, respaldado por la Encuesta de Percepción de Riesgos Globales anual, es un llamado a la acción, a prepararnos colectivamente para la próxima crisis que el mundo pueda enfrentar, y, al hacerlo, a dar forma a un camino hacia un mundo más estable y resiliente, poniendo un énfasis especial en los riesgos socioambientales que impactan directamente en el mundo empresarial.

Escrito por Chat GPT. Revisado por Fundación Basura.