El proyecto implementará “Supermercados populares”, la idea consiste en tomar productos que estén cerca de su fecha de vencimiento y llevarlos a lugares como ollas comunes, sectores socioeconómicamente vulnerables u hogares de ancianos. Considerando que la última canasta básica alcanzó el valor de $58.003 debido a la situación inflacionaria que experimenta el país. 

Por Bruno Adriazola

El 21 de agosto, la ex ministra de Desarrollo Social, Jeanette Vega, anunció que como Gobierno estaban evaluando la posibilidad de implementar “Supermercados populares”, con el objetivo de combatir la inflación que amenaza al país. Si bien Vega renunció a su cargo cuatro días después del comunicado, se espera que el proyecto siga adelante y pueda concretarse por el bien de las personas y del medio ambiente. 

La declaración ocurrió durante una entrevista con el canal de televisión Mega, en la cual la ex ministra señaló lo siguiente: “La idea es hacer exactamente lo mismo que estamos haciendo con los microbancos, pero con los supermercados, de modo que no solo entreguemos frutas y verduras, sino que también entreguemos alimentos como yoghurt, leche, etcétera”.  

La iniciativa consiste en seleccionar productos de cadenas de supermercados que estén prontos a caducar o tengan un problema con el envase, para luego donarlos a distintos lugares. Pueden ser ollas comunes, establecimientos diseñados para el proyecto, sectores residenciales de escasos recursos económicos, hogares de ancianos o centros de rehabilitación.   

El presidente de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios (Conadecus), Hernán Calderón, valora la propuesta del Gobierno y señala que, “la economía circular aquí funciona adecuadamente y me parece que es un proyecto muy interesante que esperamos tenga mucho éxito. Nosotros vamos a apoyar este tipo de proyectos, que son los que necesitamos para llegar con alimentación a bajo precio”. 

Los “Supermercados populares”, suponiendo que se concreten y desarrollen en el tiempo, serán sin lugar a dudas un gran paso para combatir dos problemas que Chile vive hoy en día. Por un lado la delicada situación económica que viven las familias debido a la inflación, que es la principal motivación del proyecto. Y en consecuencia el aumento general de los precios, que afectó a la canasta básica subiendo al valor de $58.003. Por otro lado está la salud planetaria, en el país se desperdician 1,62 millones de toneladas de alimentos al año, por lo que es urgente tomar acción.

Desde Fundación Basura hacemos un llamado a informarse sobre esta iniciativa y ser parte de ella. También es muy importante para su funcionamiento pasar la voz, comentar con familiares, amigos y vecinos. Nunca se sabe a quién pudiese beneficiarle.